El cloud computing o computación en la nube, es un término general con el que se suele denominar a todos los procesos y servicios alojados en una nube por medio de Internet.
Para aclarar un poco más el concepto, pensemos en Netflix, una plataforma cuyo servicio es permitir el acceso de sus suscriptores a una amplia variedad de series y películas que pueden disfrutar vía streaming, sin necesidad de descargarlas ni comprar ningún software o hardware adicional.
Resulta importante aclarar que la nube es un concepto distinto al de cloud computing, a pesar que este segundo término depende del primero.
Aclarando conceptos, se puede decir que la nube contempla entornos donde se llevan a cabo los procesos que una empresa o negocio esté gestionando. Mientras que la computación en la nube se refiere a la carga o ejecución de tareas dentro de una nube específica.
Volviendo al ejemplo de Netflix, la plataforma es una nube, pero la elección de la película o serie por parte del usuario es considerada una tarea y por ende es un proceso de cloud computing.
Anteriormente, la mayoría de los negocios y empresas necesitaban gastar grandes sumas de dinero en la adquisición de software y hardware para poder realizar cierto tipo de operaciones dentro de la organización.
Colocando otro ejemplo más sencillo, imagine cuántas veces tuvo que pagar por el antivirus del año, solo para asegurarse que su computadora no fuese afectada.
Hoy, todas las empresas desarrolladoras de antivirus cuentan con un servicio en la nube que es mucho más económico y se puede actualizar automáticamente.
En realidad, la principal ventaja que presenta la computación en la nube consiste en facilitar a los negocios de cualquier tamaño, la posibilidad de acceder a un conjunto de aplicaciones diseñadas para gestionar toda la información de sus procesos de manera remota e integrada.
Y todo esto sin la necesidad de contar con un gran equipo de expertos en TI, ni gastar enormes sumas en la instalación y mantenimiento constante de servidores locales, o protocolos de seguridad, porque todo esto lo provee la empresa que ofrece el servicio de cloud computing.
Existen 3 categorías de servicios alojados en la nube y que el usuario puede ejecutar mediante el cloud computing, estas son:
Cuando hablamos de infraestructura como servicio (IaaS), nos referimos a generar un mejor soporte para brindar mayor velocidad en la gestión de tareas y una capacidad escalable de almacenamiento de datos para tu empresa.
Una de las empresas pioneras en este modelo de servicio fue Dropbox, pues permitía a las personas compartir carpetas de información a través de una plataforma de almacenamiento de contenidos en la nube. Luego aparecieron otros competidores como Mega, Mediafire y Google Drive.
PaaS, este es el último tipo de servicio al que se puede acceder por medio del cloud computing, se basa en gran medida en el modelo SaaS pero a diferencia de este, cada usuario puede desarrollar su propia aplicación personalizada.
En pocas palabras, aquí tendrá todas las ventajas de contar con un software y un hardware provisto por la nube, pero los procesos que gestionará y desarrollará serán únicos para su organización, como por ejemplo la creación de un CRM exclusivo para sus procesos de ventas.
Esta categoría contempla todas aquellas aplicaciones completamente funcionales que permiten al usuario trabajar en la web y desarrollar sus tareas.
Un ejemplo de esto sería la plataforma Canva, que permite desarrollar composiciones visuales para las redes sociales y blogs, sin que el usuario deba tener grandes nociones ni conocimientos sobre diseño gráfico.
Así como existen diferentes categorías de servicios de cloud computing, también hay una variedad de tipos de nubes que usted puede contratar para la gestión de su negocio. Cada una de ellas está pensada para adaptarse a las necesidades de su rubro y todas pueden ir escalando con el tiempo.
Veamos las diferentes opciones de nubes que hay en el mercado:
Aquí el proveedor de servicios en la nube es el mismo para todas las personas que deciden tener acceso a este tipo de solución.
Volvamos al caso de Dropbox, toda persona que cree una cuenta en esta aplicación podrá subir, gestionar y compartir documentos con otros individuos en la red de manera privada. Pero la capacidad del proveedor será dividida entre todos los clientes que habrán una cuenta en Dropbox.
Es el tipo de nube más costosa y por ende solo aplica a las grandes empresas o corporaciones.
Se trata de una red patentada o servicio de datos al que solo puede acceder un número limitado de usuarios. Imaginemos empresas que cuentan con varias sedes en el mundo y que necesitan compartir información de interés.
En este ejemplo, hablamos de varias oficinas que gestionan y comparten tareas, pero que pertenecen a una misma marca registrada, por eso es una red privada.
El modelo híbrido es uno de los que está en auge, ayudando a pequeñas y medianas empresas a gestionar parte de sus procesos dentro de una nube privada, mientras tienen acceso a una nube pública.
Lo que se busca con este tipo de mezcla, es brindarle al cliente la posibilidad de ir contratando los servicios a medida que los vaya requiriendo en función de su crecimiento..
Aquí la nube no solo es pública, sino que además se comparte toda la información con todos los usuarios de la plataforma, pues suelen ser diferentes empresas u organizaciones que están resolviendo problemas comunes y necesitan acceder al mismo conjunto de datos.
Entre las ventajas que le brinda el cloud computing a su organización están las siguientes:
– Flexibilidad: A diferencia de un software o servidor local, al contratar un servicio de computación en la nube, usted podrá adaptar de forma instantánea sus respuestas ante una mayor demanda.
– Recuperación de desastres: Cuando ocurre una pérdida de datos o cualquier inconveniente tecnológico, los proveedores en la nube suelen solventar la situación en menor tiempo.
– Seguridad: Todos sus datos estarán siempre accesibles sin importar el tipo de dispositivo electrónico a través del cual acceda y toda su información estará segura y respaldada en el servidor del proveedor.
– Actualizaciones automáticas: La empresa que le brinda servicio de cloud computing es la que se encarga del mantenimiento y actualización de la plataforma.
– Colaboración: Si sus empleados trabajan de forma remota o incluso en diferentes departamentos, igual podrán compartir documentos e información en tiempo real.
El cloud computing es una forma inteligente de utilizar las ventajas de la hiperconexión que brinda Internet, ayudando a eliminar costos de mantenimiento de hardware o actualizaciones de software, a la vez que permite integrar toda la información de la empresa en un solo lugar.
Piénselo, con los sistemas de computación en la nube, su negocio puede estar a la altura de las grandes corporaciones al almacenar datos, gestionar información y desarrollar cambios en tiempo real de forma remota para todos los departamentos de su empresa.
